martes, 5 de noviembre de 2013

Reflexión: MAL DE ESCUELA



Mal de escuela es la historia de una transformación de cómo un alumno desastroso llega a ser un buen profesor y más adelante un escritor conocido mundialmente. El hecho de ser una autobiografía y que el escritor cuente todos sus problemas hace que el libro sea mucho más entretenido y llevadero.
Si por algo destaca este libro es porque hace reflexionar al lector, ya que deja la mayoría de temas en duda sobre cómo actuar. Por esto, he decidido hacer una entrada para proponer una breve reflexión sobre los temas que más me han llamado la atención.
El libro habla de uno de los temas más frecuentes en la sociedad actual como es el fracaso escolar, y deja en duda quiénes son los culpables de su existencia. En mi opinión la culpa del fracaso escolar no es como muchos creen exclusivamente del alumno, sino que se debe atribuir a diferentes factores; ya que los padres, los profesores, la política, la sociedad en su conjunto y el propio sujeto deben asumir responsabilidades y actuar en consecuencia para evitar que este fenómeno se dé con tanta frecuencia (en España alrededor de un 30%).
Otro tema que trata especialmente el libro es la labor del profesor, aunque en ningún momento Pennac indica cómo se debe actuar. Pero tras haber leído el libro me he dado cuenta de que el profesor nunca debe de dejar de lado a su alumno y siempre, lo merezca o no, deberá hacer todo lo posible por ayudarlo. Detrás del alumno incapaz siempre hay alguien capaz, ese alguien puede ser el profesor que debe actuar en cualquier momento para encaminar a ese estudiante desorientado. Este tema se ha tratado a lo largo del libro en diferentes ocasiones pero en la que más se invita a la reflexión es el capítulo de Maximilien, que más tarde comentaré. Sin lugar a duda, a través de este libro he aprendido que para que haya una buen desarrollo en la educación es imprescindible la motivación y el apoyo constante por parte del educador, ya que hay alumnos que necesitan una mayor atención que otros, sin olvidar que lo difícil y lo admirable es conseguir que el alumno con dificultades consiga estar a la altura del resto de la clase. Una frase del libro que representa a la perfección este último tema tratado es: Una golondrina aturdida es una golondrina que hay que reanimar; y punto final. Por tanto, se deben refutar ese tipo de frases negativas que se oyen constantemente en cualquier casa/escuela como son: “es que no valgo para estudiar”; “es un desastre, no puedo ver derecho de él” “es que al niño no se le dan bien las matemáticas”, etc.  Una vez dejadas de lado estas frases debemos tomar medidas inmediatas para que ese niño deje de ser un “zoquete” y pueda llevar a cabo una metamorfosis similar como la que sufrió Pennac.
Por último, no quería dejar de comentar que a través de este libro he conseguido darme cuenta de que la cooperación entre la escuela y la familia es imprescindible en la educación del niño. Además también he podido extraer de la lectura que para educar a un niño es muy importante la utilización de juegos, ya que el aprendizaje se hace mucho más ameno y hace que el niño preste mucha más atención. Sé que no he nombrado muchas más ideas que se tratan en el libro, pero a mí parecer estas son las más interesantes o al menos las que más me han llamado la atención.
Por otro lado comentar cual ha sido el fragmento del texto que más me ha gustado y por eso lo he trabajo con mayor profundidad para posteriormente exponerlo en clase junto con dos compañeros más.
El relato que más me ha llamado la atención del libro lleva por título “Maximilien o el culpable ideal” (Cap.5).
Tras leer este capítulo pude extraer una moraleja muy sencilla que es la de que si quieres que los demás te respeten debes empezar respetándoles tú a ellos. Pero reflexionando más profundamente pude darme cuenta de que Pennac realmente cuando escribió este fragmento no se refería exclusivamente al tema del respeto sino que deja en duda si la actuación que tuvo alejándose de Maximilien y no ayudándole con su trabajo sobre su obra fue correcta o no. Pennac, como ya he comentado anteriormente, a lo largo de todo el libro en los diferentes temas que trata no da ninguna instrucción de lo que es correcto ni de cómo se debe actuar frente a estas situaciones, pero sí que invita a la reflexión. Y de este capítulo he podido extraer mis propias conclusiones: el profesor no debe abandonar la tarea de educar, su labor es hacer ver a los alumnos que están actuando incorrectamente, tratar de cambiar la actitud de estos y hacerles entender que él está ahí a su entera disposición. Además, también he podido aprender que el maestro debe serlo tanto dentro como fuera del aula.

Adjunto una página web donde aparece un interesante artículo publicado en el diario El País que trata sobre Pennac y especialmente sobre Mal de Escuela, que nos puede servir para complementar los conocimientos extraídos de la lectura. Espero que os guste.



1 comentario:

  1. Estoy completamente de acuerdo con tu reflexión. Como ya se dijo en clase, el profesor es profesor dentro y fuera de un aula, igual que un policía o un bombero lo son fuera de su horario de trabajo. Muy bueno el artículo, el cual desconocía. Pennac siempre deja reflexiones interesantes como la que dice ''No hay nada más emocionante que ver como un chaval descubre que la memoria no es cuestión de acumulación''. Tengo amigos que no han llegado a sacar con éxitos sus estudios porque no han sido capaces de descubrir esto. ¡Muy buen trabajo Sergio!

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